sábado, 14 de marzo de 2015

CAPITULO 38 (FINAL PRIMERA PARTE)





—Puja, nena, puja. Lo estás haciendo tan bien. Veo su cabeza —masculló Pedro en un susurro aterrorizado.


—Arrrgggggg... —gruñó Paula cuando utilizó su última fuerza restante y dio un empuje final. Ella se derrumbó de nuevo contra la cama cuando escuchó el sonido más dulce imaginable.


El primer llanto de su hermoso bebé.


De repente el doctor colocaba a su recién nacida sobre la cima de su pecho, Paula examinó el rostro arrugado de su hija lanzando su primera rabieta.


—Ella definitivamente tiene el temperamento de su papá. —Pedro se rió mientras él frotó a su hija desde la cabeza hasta los pies, asegurándose de que ella estaba bien en todos los sentidos—. Creo que ella tiene hambre y deja que todos lo sepamos. —Se rió entre dientes.


Incluso agotada, Paula miró de su marido a su bebé y sintió el orgullo y la felicidad de cómo su familia creció. Ella podía ver el amor y el orgullo brillando en los ojos de Pedro, y era la cosa más hermosa en el mundo.


—A Olivia le gustaría tener a su padre abrazándola ahora —le dijo Paula Pedro. Él con cuidado la recogió y la sostuvo estrechamente contra su pecho. El movimiento diminuto de su respiración era el sentimiento más asombroso en el mundo. La noche anterior, había estado sintiendo sus patadas de dentro de la segura matriz de Paula. Ahora, él la sostenía en sus brazos.


Los doctores rápidamente limpiaron a Paula y Olivia, luego los tres se trasladaron de habitación.


Estaban allí no más que unos minutos cuando alguien llamó a la puerta.


—¿Podemos entrar? —dijo la voz tenue de su suegro normalmente potente.


—Entra, entra, papá. Conoce a tu primera nieta, Olivia Alfonso —dijo Pedro con orgullo.


Horacio con cuidado tomó a su nieta, una lágrima se derramó por su mejilla. Las cosas no habían resultado mal en absoluto, pensó para sí mismo. Él estaba en un hospital, sosteniendo a su nieta recién nacida y su hijo estaba felizmente casado.


Su hijo debería agradecerle, pero Horacio sabía que era mejor no pedir cualquier alabanza por todo lo que había hecho para conseguir a estos chicos juntos. Su hermosa nieta eran todas las gracias que él necesitaba.


—Ustedes dos lo han hecho realmente bien aquí —dijo Horacio mientras él sonreía de Paula a Pedro—. Ella es la bebé más hermosa que alguna vez he visto en mi vida —continúo él.


Él de mala gana le dio la bebé a Ana y miró un brillo venir sobre su rostro cuando ella se sentó en la mecedora y la alimentó con el preciado don de su pecho mientras tarareaba una canción de cuna.


—Casi conseguimos un bebé de navidad. —Horacio rió. Era veintitrés de diciembre. Todos convinieron que Olivia era el regalo perfecto para la familia entera.


—Supongo que tendremos que trabajar en darle un hermanito a Olivia para que nazca en la navidad del próximo año —dijo Pedro mientras miraba ávidamente a su esposa. 


Ella era todavía la cosa más hermosa en el mundo, aun después de los trabajos forzados que ella había soportado.


—Ahora, hijo, de verdad quiero un montón de nietos corriendo por todas partes de la vieja mansión vacía, pero tú no puedes querer asustar a tu esposa. No es una buena idea hablar del segundo niño cuando aún se siente el dolor del primero. —Él guiñó a Paula.


—El dolor ya está olvidado, papá. Amo a esta criatura más que a nada en el mundo, y quiero darle muchos hermanos. Amo a Pedro tanto y este amor tiene que ser compartido con los maravillosos niños que sé que haremos.


El corazón de Horacio se amplió un poco más por cuánto él amaba a su nueva hija. Le había pedido llamarle papá porque sabía que ella no tenía uno. Él realmente la amaba como si fuera uno de sus propios hijos. Ya que ella estaba casada con su hijo, era su familia ahora. Todavía le gustaba oírselo decir, sin embargo. Él se inclinó y besó su mejilla.


Hubo otro golpe en la puerta, luego la cara de Paula estalló en una enorme risa cuando Tomas dio un paso por la entrada, llevando un enorme osito de felpa, globos y una bolsa grande de chocolates.


—Tomas, estoy tan contenta de que finalmente estés aquí —dijo Paula a su mejor amigo.


—Hubo un accidente en la autopista, o yo habría estado aquí hace una hora —dijo Tomas mientras él se inclinó y la besó en la mejilla.


—Ven y conoce a tu ahijada —dijo Paula. Los ojos de Tomas al instante se llenaron de lágrimas cuando él tomó el precioso bulto en sus brazos.


—Ella es perfecta, Paula. Justo como su mamá —él le dijo, tratando de mantener sus emociones bajo control. Todos la visitaron durante aproximadamente una hora, el corazón de Paula casi rebosaba por cuánto amor ella tenía por las personas en la habitación con ella.


—Lo has hecho bien, Paula. Estoy muy orgulloso de ti. Los dejamos solos con su niña ahora —dijo Horacio mientras ayudaba a su esposa a ponerse de pie.


Ana se acercó a la cama y pasó a su nieta a su madre, donde inmediatamente empezó a rebuscar el alimento. Eso les dio risa a todos.


—Te amo también, mamá. Estoy tan contenta de que estuvieras aquí — Paula se emocionó. Ana rozó un beso a través de sus mejillas y luego caminó de la mano fuera de la habitación con su marido.


Los dos giraron en la esquina, los ojos de Horacio centellearon.


—Bien, Ana… uno ya está, faltan dos. Me gusta ser abuelo y me estoy volviendo codicioso ahora. Quiero nuevos bebés cada año durante los próximos diez años o así —declaró él, como si de verdad obtuviera su deseo.


—Ahora, Horacio. Admito que esto resultó bien, pero tú no te entrometerás más en la vida de tus hijos. Ellos pueden encontrar a sus propias compañeras y encontrar su propio camino —dijo ella severamente a su marido, aun cuando supiera que era una batalla inútil. Horacio solamente envolvió su brazo alrededor de su esposa, silbando una melodía mientras ellos se dirigían a su auto. Él ya tenía la novia perfecta elegida para su hijo intermedio, Alejandro…



4 comentarios:

  1. Ayyyyyyyy, qué susto!!!!!!! Menos mal que todo se solucionó y Pedro no la engañó. Gracias Carme x tan hermosa historia!!!!!!!!!!!

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  2. Gracias Carme.. Es hermosa esta historia, me emocione con Olivia !!

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  3. Ay! Menos mal que no era como parecía!!!! Hermoso y sufrido final!!! Amé el nacimiento de Olivia y la familia que ganó Pau! jajaja Me encantó! Ahora estoy ansiosa por saber que tiene en mente Horacio!

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